Mientras la ciudad de Durango padece el descuido de sus servicios públicos más elementales, señalamientos de dudoso manejo de recursos se extienden por los pasillos de la dependencia.
EUSKERA INVESTIGA
La filosofía en el actual Gobierno Municipal parece sugerir que la administración pública se considera un negocio temporal. La Dirección de Servicios Públicos no escapa a este fenómeno. Sin embargo, una serie de irregularidades están generando inquietudes sobre la transparencia en el manejo de recursos.
De acuerdo con fuentes cercanas a este medio, meses atrás, la Dirección de Servicios Públicos, a través del área de Gestión de Infraestructuras de la dependencia, realizó la licitación para la compra de un volumen importante de pasto sintético que tendría distintas aplicaciones en áreas públicas de la ciudad. Dicha licitación fue firmada a su vez por la subdirección administrativa. A pesar de que el contrato fue formalizado, el material nunca llegó a su destino. La dependencia habría depositado a la empresa ganadora un monto cercano al millón de pesos. El tema es del conocimiento de cada persona dentro de la dependencia y ha trascendido a otras áreas municipales.
La instrucción de hacer el pago se dio desde la dirección de la dependencia. No es la primera vez que en los pasillos de estas oficinas se habla de movimientos financieros dudosos. Los señalamientos coinciden con el reciente cambio de residencia del funcionario que habría dado la instrucción, al pasar de vivir en una casa de la colonia Valle del Guadiana, a una residencia en el coto privado Scorpio, ubicado en una de las zonas más exclusivas de la ciudad, rumbo a la salida a Mezquital.
LA DEPENDENCIA DESMANTELADA
A medida que crecen este y otros señalamientos, la dependencia enfrenta una serie de graves problemas operativos y como consecuencia desatiende en lo general las necesidades urbanas. A la fecha, Servicios Públicos tiene un acumulado superior a los 500 reportes sin atender, en distintas áreas, un número inédito con relación a otras administraciones municipales. Esto se atribuye a una gestión deficiente de la dependencia y sus principales colaboradores. Hoy, Servicios Públicos tiene reducido a menos del mínimo su parque vehicular por falta de mantenimiento de las unidades. Por ejemplo, de las nueve grúas que tiene la dependencia, actualmente solo funcionan dos. Y casi la totalidad del personal operativo se reporta sin las herramientas suficientes para el desempeño de sus labores.
SEÑALAMIENTOS ACUMULADOS
Pero, esto no es exclusivo de la Dirección Municipal de Servicios Públicos. Desde funcionarios que despachan en cafeterías, “aviadores”, mal uso de recursos públicos, actos de prepotencia sobre los trabajadores municipales, son algunos de los aspectos que despiertan cada vez más señalamientos hacia las dependencias de la actual administración municipal. Poco a poco, vamos hablando de todo.
EN LA MIRA
En la siguiente entrega de TESTIGO PROTEGIDO: Segismundo: el amor en tiempos de transparencia.