EUSKERA
Durango, Dgo.- A través de redes sociales, amigos y familiares de Lupita Rojas Vázquez celebraron que la justicia llegó a más de dos años de este brutal feminicidio, en el que el responsable incluso huyó para evadir la justicia.
Margarita Vázquez, la madre de Lupita presenció la audiencia en la que, si bien una parte de ella se sentía agradecida de ver que por fin se hacía justicia para su hija, la otra parte recordaba que Ángel Molina no solo acabó con la vida de Lupita, sino que destruyó la familia de los hijo de ambos, así como la de la misma Margarita, quien buscó a su hija desde el primer día de desaparecida sin imaginar que solo encontraría su cuerpo con visibles huellas de violencia dentro de la cajuela del carro de Ángel.
“Ya nada le devuelve la vida a mi hija, pero me da gusto que se haga justicia. Que pague todo el daño que le hizo a mi hija y que nos hizo a todos, a sus propios hijos, aunque ya con nada puede pagar”, dijo en entrevista para EUSKERA.
Con voz cortada pero con tranquilidad, Margarita narra el momento en el que pudo ver al feminicida de su hija durante la audiencia donde fue sentenciado a casi 80 años de cárcel: “que le puedo decir… sentí mucho coraje al verlo, pero también gusto de que lo hayan capturado y que pagué ahí encerrado”.
Los hijos de Lupita ahora están a cargo de su abuela. Han pasado dos años en los que los pequeños tuvieron que adaptarse a la ausencia de sus dos padres, en medio de muchas interrogantes que probablemente querrán esclarecer cuando sean adultos.
“Los hijos de lupita ya no preguntan nada… ni por su padre, qué bueno, me da gusto que ni siquiera pregunten por el padre porque no se lo merece por la forma en cómo le arrebató a su madre”, responde Margarita al ser cuestionada sobre sus nietos.
Lupita desapareció el 22 de octubre del 2022, un día después de no saber nada sobre ella, amigos, familiares e incluso el feminicida, comenzaron a buscarla a través de redes sociales. Ángel aseguró que no sabía nada sobre ella y pensó que unirse a la búsqueda lo libraría de sospechas.
El 26 de octubre se presentó una denuncia formal por desaparición, fue ahí cuando Ángel no pudo fingir más y huyó llevándose a sus dos hijos. Fue hasta el 31 de octubre cuando localizaron el cuerpo sin vida de Lupita en la cajuela del automóvil de su entonces pareja.
El feminicida se mantuvo prófugo hasta que fue detenido en el mes de julio de año 2024.
“Siempre fue doble cara, porque le daba una cara a uno y con mi hija era canijo, era violento. Mi hija le tenía miedo, pero nada más que no nos lo decía… terminó en tragedia y ya mi hija descanse en paz al fin llegó la justicia”. Ángel Surizaday Molina Cuellar, pasará el resto de su vida en prisión. La señora Margarita ha cerrado el ciclo más doloroso de su vida, para dedicarse a honrar a su hija a través de la vida de sus nietos.
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