EUSKERA
Durango, Dgo.- Una niña de 11 años se acercó personalmente a pedir el apoyo de personal de DIF Municipal cuando se encontraban en trabajo de campo. Sus padres la obligaban a vender dulces y le imponían una cuota diaria para poder regresar a casa.
Fue en el crucero de Felipe Pescador y avenida Tecnológico, donde la pequeña se armó de valor para denunciar el abuso de sus propios padres.
Hace por lo menos cuatro semanas la niña era obligada a salir sola a las calles, bajo amenazas, para juntar por lo menos 300 pesos al volver a su hogar.
Casa Hogar de DIF Estatal es la encargada de resguardarla en lo que se desarrolla un proceso legal contra los padres.
Pese al rescate de la pequeña, este es solo uno de los casos de explotación laboral que se ven por todo Durango. DIF reporta el registro semanal de por lo menos 10 niños trabajando en las calles, la mayoría son reincidencias.