EUSKERA

Washington.– En medio del descontento, los votantes estadounidenses decidieron apostar por el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, reflejando el rechazo a la gestión de Kamala Harris. Según la encuesta AP VoteCast, que consultó a más de 120,000 votantes, el 30% del electorado expresó su deseo de un cambio radical en la forma de gobernar el país.

El triunfo de Trump fue por un electorado alarmado por la situación económica, la inflación y el aumento en el costo de vida. En estados clave como Pensilvania y Wisconsin, los votantes priorizaron la estabilidad económica y la implementación de políticas más estrictas de inmigración, aspectos que Trump abordó con un enfoque muy duro. A pesar de las prioridades de Kamala, como la defensa de la democracia y los derechos reproductivos, estos temas no fueron suficientes para inclinar la balanza a su favor.

Sin embargo, el retorno de Trump no fue recibido sin preocupaciones. Aunque ganó el colegio electoral, muchos votantes expresaron su temor de que una nueva presidencia bajo su liderazgo pudiera llevar a EE. UU. hacia un régimen autoritario.